El pasado 1 de agosto la fotógrafa Melissa Jean, que se dedica a inmortalizar momentos relacionados con la maternidad (embarazos, partos, lactancia, maternidad, paternidad, etc.) celebraba el inicio de la Semana Mundial de la Lactancia Materna con algo que no esperaba: recibiendo un mensaje de Instagram conforme habían cerrado su cuenta como modo de censura porque las fotos que publicaba eran provocativas.
Más de 800 fotos que reflejaban su trabajo de mucho tiempo, aquello a lo que se dedica, detrás de las que había amigas, amigos y clientes que habían contratado sus servicios y habían expuesto momentos íntimos para ser capturados y, en cierto modo, cedidos para mostrar al mundo lo bonito, curioso o mágico que puede resultar dar a luz, estar embarazada, cuidar de un bebé o amamantarle. ¿Fotos provocativas? Vamos a ver algunas de ellas.
La noticia le llegó del peor modo posible. Quiso entrar en su cuenta de Instagram y un mensaje le avisó de que no era posible porque había sido eliminada por no seguir sus normas. Además, el mensaje añadía "No podemos restaurar las cuentas que han sido eliminadas por este tipo de violaciones".
Sintió como si le tiraran encima un jarro de agua fría y se quedó un día entero sin hacer nada al respecto. Defraudada, vio que vencía la hipocresía de un mundo que permite la exhibición del cuerpo de la mujer a diario pero no la visión de los cuerpos en los actos más naturales y bellos, y en consecuencia, sintió que vencían las personas que comentaban sus fotos criticándolas.
Al día siguiente publicó un estado en Facebook explicando lo que le había pasado y empezó a recibir el apoyo de sus amistades y de un buen número de personas que admiraban su trabajo y/o que habían sido inmortalizadas por su cámara y decidió que había que hacer algo. Hablo con el Daily Mail y con otros medios para explicar lo que había sucedido.
Unos días después, en concreto el día 6, el mismo diario hacía público que Instagram había restaurado la cuenta y que pedían disculpas porque, pese a que no se permiten los desnudos totales o parciales, las fotografías de lactancia materna están permitidas.
Vinieron a decir que todo fue un malentendido porque cada día revisan millones de fotos nuevas y que, aunque les gustaría no cometer errores, a veces lo hacen.
Así que al final todo fue una decisión errónea (que motivó que publicara esta foto de arriba recientemente, creo yo que con toda la intención) que por otra parte ha ayudado a Melissa a tener unos cuantos seguidores más (ha pasado de 18.000 a 30.000) y a nosotros a conocer su preciosa obra, digna de ser compartida tanto si su Instagram es censurado como si no.
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